La jefa de la oposición en Cataluña ha recibido el apoyo de Anna Gabriel y de Mònica Oltra, entre otros
La líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, denunciará a una usuaria de Facebook que en un comentario la tildó de “perra asquerosa” y le deseó “que la violaran en grupo”. Arrimadas lo ha anunciado a través de su cuenta de Twitter.
Aquí una muestra clara de odio. Voy a denunciar a esta señora.No solo por lo q me dice a mí sino por todas las mujeres que han sido violadas pic.twitter.com/AGn0oFW9Oa
— Inés Arrimadas (@InesArrimadas) September 5, 2017
Miles de usuarios y también políticos de todas las formaciones han mostrado a la jefa de la oposición su apoyo a través de la red, entre ellas la diputada de la CUP Anna Gabriel, la vicepresidenta de la Comunidad Valenciana, Mònica Oltra, o la portavoz del PSC en el Parlament de Cataluña, Eva Granados. También la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha condenado el mensaje, que considera una “vil ofensa a millones de mujeres que sufren violencia”.
No es la primera vez que un político catalán recibe una amenaza a través de las redes sociales y decide ponerlo en manos de la justicia. El pasado 17 de abril, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, también anunció que denunciaría a un usuario que la insultó y la amenazó con violarla vía Twitter. El tuit iba acompañado de la fotografía de una pistola semiautomática. Asimismo, el presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, también informó de que tomaría medidas contra un usuario que le había amenazado con “ponerle una bomba bajo su coche” a través de Facebook. Unos días después el autor del mensaje pidió disculpas, alegando que lo escribió “en un momento de calentón”, y Puigdemont se las concedió. “Al amenazarme, dije que era un cobarde. Hoy ha sido valiente y ha tenido el coraje de pedir perdón públicamente. Se lo agradezco. Tema cerrado”, tuiteó el presidente de la Generalitat.
UNA SENTENCIA PIONERA
En el año 2014, la presidenta de la Comunidad de Madrid y entonces delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes, fue una de las primeras en conseguir que un juez de lo penal condenara a un tuitero por insultos contra su persona. En un inicio, la Fiscalía y los abogados de Cifuentes pedían cuatro años de cárcel para el acusado. Finalmente, después de que el usuario reconociera los hechos, el juez lo condenó a pagar una multa de 300 euros, además de las costas del proceso y una indemnización de 1000 euros en concepto de daños y perjuicios.