El Congreso del Estado de Guerrero, en el sur del país, aprobó una iniciativa de ley para despenalizar el cultivo, producción y comercialización de la amapola con fines medicinales. Debido a que la propuesta plantea modificaciones a ordenamientos federales, como la Ley General de Salud y el Código Penal, fue enviada al Senado mexicano para que sea discutida. El diputado que presentó la iniciativa, Ricardo Mejía Berdeja, consideró la aprobación del dictamen como un paso histórico porque con ello se lleva el polémico tema al Congreso de la Unión en un contexto donde la administración que habrá de encabezar Andrés Manuel López Obrador se ha pronunciado a favor de debatir el tema. Guerrero es la primera entidad del país que se pronuncia públicamente y mediante un documento legislativo a favor de la legalización de la planta con la que se produce la heroína.
En Guerrero, donde en 2014 desaparecieron los 43 normalistas de Ayotzinapa, los carteles mexicanos se disputan el mercado del opio. En las montañas del Estado los campesinos se dedican principalmente y en algunos casos exclusivamente al cultivo de la amapola. Durante la aprobación del dictamen la diputada Magdalena Camacho Díaz dijo que los campesinos que siembran la planta sólo tienen ingresos durante la temporada de lluvia que venden el kilo de la goma de opio entre 6.000 y 8.000 mil pesos (entre 315 y 421 dólares). Algunos de ellos, explicó, quieren dejar el cultivo, pero no tienen otros medios de subsistencia.
El Estado, uno de los más golpeados por la guerra contra el narcotráfico en el país, es el principal productor de opio en el país, según datos de la Secretaría de la Defensa Nacional. A nivel mundial ocupa el tercer puesto, solo por debajo de Afganistán y Myanmar, según informes de organismos internacionales. La iniciativa fue aprobada por 43 votos a favor y uno en contra. “Hemos vencido resistencias y prejuicios con este dictamen, es un paso histórico”, manifestó Mejía Bermejo, del partido Movimiento Ciudadano.
La propuesta fue presentada en el Congreso local en marzo de 2016 y desde entonces se realizaron foros y consultas en los diversos municipios de Guerrero para conocer la opinión de los ciudadanos y los productores. Durante los recorridos por las localidades de la montaña los diputados consiguieron firmas de respaldo a fin de contar con el mayor respaldo ciudadano a la polémica propuesta. Con las modificaciones que se plantean a la Ley de salud las autoridades sanitarias podrían brindar permisos y licencias para el cultivo de la amapola con el objetivo de producir medicamentos que ayuden a paliar el dolor de diversas enfermedades.
La legalización del cultivo de amapola ayudaría a resolver las problemáticas de inseguridad, violencia y corrupción institucional que se vive en la entidad y podría fortalecer la economía local, ya que las personas que cosechen amapola reportarán sus ingresos fiscales y aumentarán los empleos formales, se plantea en el documento aprobado por los legisladores y que fue difundido por el diario El Sur.